martes, 7 de julio de 2009

La importancia de llamarse Óscar

— Pucha niña, ¿cómo te lo cuento? Me echaron de la pega.
— Pero... ¿Cuándo? ¿Por qué?
— Fue de a poco. Cada semana me daban menos trabajo, no me llamaban para las pautas. Hasta que esta mañana, cuando fui a la pauta, me dijeron que ya no me necesitaban. Así de simple.
— ¿Alguna razón justificada?
— Sí, aunque no era la oficial: haberme acostado con el antiguo editor.

El pobre Óscar estaba a punto de llorar. Pero se contuvo, como lo hace siempre... Excepto cuando vemos una comedia romántica: con esas siempre llora. Pero nunca lo hace cuando habla de sus dramas.

Me llamó al celular justo después de la pega. Yo ya había empezado a contarle mis tonterías de pareja cuando me dijo con un tono que me asustó: “Anaís, tenemos que hablar. ¿Podemos juntarnos en mi casa?”.

Si hubiese sido Simón o cualquier otro hombre, esa frase me habría hecho temblar de miedo. Pero siendo Óscar, lo único que sentía era preocupación.

— ¿Cómo sabes que fue por eso? Puede que estén haciendo reducción de personal, que alguien te haya aserruchado el piso...
— No, niña. Fue por eso. Te conté que estuve saliendo un tiempo con un ex editor de Nacional, ¿verdad?
— Sí... ¿el que siempre usaba corbatas negras, que estaba cagado de miedo cuando cachó que le gustaban los hombres? Me decías que te encantaba su voz.
— Cuando estudiaba estuvo en el coro de la universidad. Era bajo. De la voz, digo. ¡Y tan tierno!
— ¿Y qué pasó?
— Se cagó de miedo cuando su señora quedó embarazada por segunda vez. Así es que agarró sus cosas y se fue a Estados Unidos a hacer un magíster en no-sé-qué. Y yo me quedé solito, chupándome el dedo.
— Pucha, Óscar...
— Igual encuentro que fue lo mejor. No quería dejar a su señora, ¿sabes? No la amaba, pero la quería mucho. Y también a su hijo. Yo jamás le habría pedido que dejara a su familia. Pero eso no importa. Lo nuestro fue súper bonito, me deja como un recuerdo dulce, ¿sabes? Lo malo pasó después...
— Se supo.
— No sé cómo. Siempre fuimos súper discretos. Pero un día noté que la actitud de mis compañeros había cambiado: aumentaron los chistes de maricones a la hora de almuerzo; el fotógrafo con el que siempre trabajaba, que era re bueno para echar la talla, de pronto se quedó mudo; el nuevo editor me pasaba rechazando las notas y tenía que reescribirlas tres o cuatro veces. Al final me dijeron que “podían prescindir de mis servicios”. Me pagaron lo que me debían y me dieron una patada en el culo.
— Pucha, Óscar...

Lo abracé, le di un beso en la frente y le hice cariño en la cabeza. Él se pegó a mí y me dijo que me quería mucho, que gracias por haber venido y que yo era su mejor amiga. Pensé que quizás ahora se le ocurriría reflotar su abandonado proyecto de crear una revista digital: siempre había querido embarcarme en él, pero yo siempre trataba de escabullirme.

De pronto se paró y me ofreció un café. Mientras estaba preparándolo, sonrió.

— ¿Sabes qué? La semana pasada, una amiga me mandó un mail avisando que se liberaba un puesto en una revista de decoración. Creo que me iría súper bien ahí: tengo re buen gusto.
— En eso tienes toda la razón.

Siempre le he alabado a Óscar la decoración de su casa. Es cierto que a veces no hace la cama y se olvida de lavar la loza, pero sabe combinar colores y cómo organizar el espacio. Aunque decora con puras cosas de remates y cerámicas de todos los diseños imaginables, Óscar consigue darles un toque muy chic. Siempre tiene flores frescas y sabe aprovechar la luminosidad del departamento.

— Le voy a responder. Igual ya estaba medio cansado del diario: es un ritmo súper agotador. Ahora quizás voy a tener más tiempo para mí y para el proyecto.

Me miró con cara cómplice, pero yo lo evité. Igual sonreí. Eso es lo que más me gusta de Óscar: nunca se queda pegado en los problemas. Me gustaría parecerme a él en eso.

15 comentarios:

Lágrima Perpetúa dijo...

Tenemos que aprender un poco de Oscar =S

Bowman dijo...

Hola Anaís, desde luego me descubro ante tu amigo, tras el golpe de verse despedido, ver una luz en medio de la oscuridad, en vez de derrumbarse, buscar una solución.
Si en vez del editor, se hubiera acostado con una mujer, no pasaría nada; que asco de mundo, que te señala por ser diferente.
Cuídate mucho, hasta pronto.
Un abrazo

PD: Te digo lo de Mari Carmen, no se me ha olvidado lo de la tarea, estamos en ello.

@webero01 dijo...

dos moralejas: es peligroso involucrarse con los d la chamba,, y siempre ver el lado bueno,,

saludos ,,,

Vane dijo...

Que rabia e impotencia con esos tipos!! pero realmente admirable la capacidad de Oscar por tratar de buscar una solucion y no morir en el problema! Gran amigo tienes genial que él te tenga a ti, que cuente con tu apoyo en estos momentos dificiles, porque aunque él sepa safarse de ello y buscar soluciones igual le debe doler mucho todo esto, mandale un gran abrazo de mi parte! :D
besos Anaís y el meme preparando... no se porque me cuesta sacar lo qeu amo de mi :s
nos leemos bye!

Floripondia dijo...

Bien por Oscar mujer, y vos una genia... muy buena amiga.

Besotes

Anaís Sandiego dijo...

Mari Carmen: mi amigo es lo mejor del mundo... yo lo adoro. Y espero con ansias sus 7, pero tampoco quiero apurar demasiado :)

Lágrima Perpetua: sí, definitivamente. Yo soy una alumna un poco porfiada, pero él es un gran maestro.

J. Carlos: es tan injusto este mundo, qué rabia me da. Óscar es una buenísima persona y no me cabe duda que es buenísimo profesional también, pero todavía no erradicamos la discriminación. Un abrazo.

Webero: yo agregaría una tercera que tenga que ver con el tema de la discriminación, que nos impide ver a las personas por lo que son y lo que valen.

Blanky: jeje... le daré tu abrazo (Aunque para eso tendré que explicarle un poco a qué va todo este asuntito del blog).
Cuesta sacar lo mejor de uno, por eso mismo es un buen ejercicio para conocerse y quererse. Besos

Floripondio: ojalá que todo le resulte como siempre ha pasado con esa gran fuerza interior que tiene (a ver si se me pega un poco... jeje).

Michelle dijo...

que pena lo que le pasó! super pesados (por no decir una palabra fea jajaja), aunque ahí que aceptar que en nuestra sociedad y en la mayoria de las sociedades así son las cosas, mucho no podemos hacer...

un beso para ti =)

Guadyx dijo...

Lo que senti al leer esta entrada fue una enorme mezcla entre bronca (enojo) y admiración. Bien por Oscar, sin dudas tiene un GRAN nombre... y por supuesto, bien por su amiga tmb!
Besos

Espérame en Siberia dijo...

Sí. "El lado oscuro del corazón" es de esas pocas películas que te dejan retumbando preguntas durante muchos días después de verla. Pero vale tanto, tanto la pena.

Un abrazo.

Francisca dijo...

Que paja... pero al menos es positivo y supo dar vuelta la página (admirable).
Te dejé un premio!!
http://alegarikous.blogspot.com/2009/07/premio-para-la-honestidad.html

Saruki dijo...

Chutas, que heavy.
Mientras leía imaginaba a tu amigo.

Aunque algunas personas no hacemos el problema tan evidente... y lo escondemos con una tierna y angelical sonrisa... él no la debe estar pasando bien.

Qué más decir.. la vida sigue... de una u otra forma.

Anaís Sandiego dijo...

Michelle: dila no más que s ela merecen, ellos sí son maricones que es bien distinto a ser homosexual o gay (ya me salió la bronca again). Saludos :)

Guadyx: es exactamente la mezcla que sentía al escribirla. Beso.

Espérame en Siberia: sí, vale muschísimo la pena, además que los versos te llegan al corazón.

Francisca: ¡mi primer premio! ¡millones de gracias! En este minuto paso a retirarlo ;)

Satuki: lo más importante es que él lo tiene claro (yo creo que ayer yo estaba más enojada que él). Óscar es un ángel :)

Mo dijo...

Muy buena la actitud de tu amigo Oscar.. me ha parecido una persona muy coherente a pesar de estar pasando ese mal trago.. A mi también me gustaría contagiarme más de esas actitudes..porque son positivas y un ejemplo a seguir... Así tu amigo seguro que pronto muy pronto está otra vez en la cumbre...
Caer y levantarse y cuanto más rápido mejor...

Un besazo Anais.. y a ver si pronto hago tu tarea.

Sam Mezylv dijo...

Me alegro que Oscar haya encontrado casi de inmediato un nuevo trabajo!!!. que como están las cosas por estos días.. Ufff!!!.. Seguro es un tipo con suerte, ya aparecerá quien lo valore de verdad.

Cariños y felicidades por tu premio!!!!

Cariños

Sandra

Anaís Sandiego dijo...

Moni: yo trato de aprender de él porque realmente lo quiero y lo admiro mucho. ¡Es genial tener gente tan linda cerca de uno!

Sandra: en realidad en estos momentos está 'en conversaciones'. Pero lo bueno es que tiene millones de conocidos y ya sabemos que este país es puro pituto. ¡Besos!

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