miércoles, 27 de mayo de 2009

La desconfianza

¿Qué soledad es más solitaria que la desconfianza?
George Eliot

Encontré esa frase hoy y me hizo mucho sentido. Es triste desconfiar porque uno corre el riesgo de quedarse solo y de encerrarse cada vez más en sus sospechas. La desconfianza es como un germen muy difícil de sacar, una especie de virus que puedes controlar, pero no acabar con él, siempre quedarán restos, fantasmas.

La desconfianza en la pareja no se da por el hecho de ser infiel, sino por querer negar verdades obvias o por tratar de convencernos de algo que para nosotros es, evidentemente, una mentira. Yo no sé si Simón realmente tiene (o tuvo) algo con Patty la hamburguesa, pero el hecho de que no me lo haya aclarado bien y que más encima me haya cambiado de tema, me hace dudar de él y de sus intenciones.

La desconfianza no se limita al ámbito de las relaciones amorosas, también puedo desconfiar de una amiga que pasa diciéndome lo bonita y regia que estoy cuando es obvio que tengo kilos de más, unas tremendas ojeras y se me olvidó maquillarme. Es, en el fondo, cuando una careta se vuelve tan evidente que deja ver lo que hay detrás, cuando se deja en evidencia segundas intenciones.

Cuando llega la desconfianza, no hay nada que se pueda hacer para extirparla. Se instala en nuestras cabezas para siempre, como una especie de Pepe Grillo, pero que permanentemente se está cuestionando todo a su alrededor: ¿sólo se estaba tomando un café con Patty? ¿y si era algo más? Pero esa amiga tuya que te dijo que te iba a apoyar y después no apareció ¿será que en realidad no es tu amiga? ¿no te quiere? O peor ¿te querrá hacer daño?

Aprender a vivir con la desconfianza es aprender a convivir con esa vocecita interior que siempre te estará haciendo preguntas y poniendo en evidencia lo tonta que eres al confiar en la gente. Pero también significa aprender a controlarla, a no dejar que esa voz te convenza y a enfrentarla permanentemente con tu razón. No es fácil y no siempre ganamos, pero hay que dar la batalla hasta el final.

28 comentarios:

Lágrima Perpetúa dijo...

Muy buena descripción, yo estoy en esa batalla, es bien dura y a momentos devastadora, pero creo que comienzo a ver la luz al final del túnel, por lo menos los primeros rayos. Lo mejor de todo es que tienes la capacidad para analizarlo de está manera, qué estás conciente, creo que eso colabora para salir y desechar la confianza. Aunque sinceramente no tengo pruebas de que una vez instalada la puedas deshechar por completo o si siempre queda una vaga desconfianza.
Ánimo, las cosas se acomodan poco a poco, verás que si.

@webero01 dijo...

una vez q se pierde la desconfianza,, cualquier situacion se puede volver en sospechosa ,, es muy dificil, las cosas cambian,,,



saludos,,,

SandraL dijo...

Soy de la idea de que la confianza no hay como parcharla.. si se rompe.. ya no hay vuelta atras.. uno puede disculpar un error en la otra persona.. pero lamentablemente.. no se olvida...

Hace un tiempo escribi sobre el tema de tu entrada.. si te parece hechale un ojo..
http://corazondenuez.blogspot.com/2009/05/la-copa-de-la-confianza.html

Un abrazo!

young_supersonic dijo...

EL MEJOR CONSEJO TE LO DISTE TÚ MISMA EN EL ÚLTIMO PÁRRAFO, POQUE AL MARGEN DE QUE SEA VERDAD O NO LO DE SIMÓN, VIVIR ASÍ DE DESCONFIADA POR LA VIDA SE VA A CONVERTIR EN UNA PESADILLA DEMASIADO REAL.

YO NO CREO SER POETA, PERO CRÉEME QUE NO ME SALE OTRA FORMA DE EXPRESAR CUANDO ALGO SOBRE LO QE QUIERO ESCRIBIR ESTÁ BASADO EN HECHOS REALES.

Y TÚ COMENTARIO FUE MUY CERTERO. ELLA ESTÁ EN EL SUR. YO EN EL NORTE Y NOS CONOCIMOS EN VALPARAÍSO.

SALUDOS.

Leslie Miranda dijo...

Yo no soy pa ná desconfiada. De hecho, confío muchísimo en los que me rodean. Creo que sería muy infeliz siendo desconfiada y pasándome rollos todo el tiempo, no sé. Yo creo que es porque las personas que son parte de mi vida en estos momentos han sido los que más me han apoyado en todo, y nunca me han fallado, y confío en que no lo harán. Eso me da mucha fuerza.

No digo con esto que confíe en todo el mundo y ande por la vida a ojos cerrados..

Y con mi pareja, nuestra realción se basa en la confianza. Creo que no puedes comprometerte con alguien si no confías en él, si no es así, ¿cómo puedes entonces expresar tus sentimientos y apoyarse mutuamente?

Es mi humilde opinión.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

Es verdad, una vez que desconfias olvidate, es dificil volver al estado anterior, ademas es como vos decis te empezas a maquinar con todo, y terminas siendo re paranoica, si me ha pasado. es horrible. Saludos!

Anaís Sandiego dijo...

Lágrima Perpetua: espero que el análisis ayude, como tú dices, porque algunas veces pasa que uno por más que lo piensa y tiene las cosas claras, termina haciendo las cosas mal. Saludos.

Webero: así es... por eso es una batalla diaria (asumo que era la pérdida de la confianza, ¿no?... jeje). Saludos.

San: me pregunto si se podrá armar otro jarrón... leeré tu entrada, gracias por postearla ;)

Young Supersonic: espero tampoco caer en esa pesadilla como tú dices. Insisto es una lucha diaria. Saludos.

Leslie: y mucho se agradece su opinión. Quizás la confianza/desconfianza depende también de las personas con las que nos rodeamos, porque obviamente si recurrimos a personas “falsas” seremos más desconfiados. O porque quizás les damos demasiada importancia a pocas personas que nos hacen desconfiar del resto. Un abrazo.

Srta. Amor: espero no volverme paranoica tampoco. Supongo que es cosa de saber manejarlo. Saludos.

Natilla dijo...

Muy bueno el post, hace poco escribí sobre un tema relacionado en el mío, pero centrado más en las amistades. Al final la desconfianza puede destruir una relación tanto amistosa como amorosa. Para mí pasa por la decepción y la noción de que te mintieron o manipularon. Y siento que de ahí no hay vuelta atrás. Se te mete el bichito de la desconfianza y andas a la defensiva, y nada vuelve a ser lo mismo que antes. Puede ser parecido, pero jamás igual. Ahora, siempre depende de los niveles de desconfianza, pero cuando estás bien segura de que te hicieron algo feo, creo que es irreparable.
Lo importante, como tú bien dices, es controlarla y que no te controle a ti. Está bien, es sano y habla de un aprendizaje, el desconfiar de quien te hirió. Pero no se puede estar desconfiando de todo el mundo. Quizás te perderías la oportunidad de encontrar a alguien en quien sí vale la pena confiar (léase como pareja o como amigo).
Saludos, muy buen blog.

Saruki dijo...

No es sano vivir en desconfianza.
Ahora... mi má siempre dice que en la confianza está el peligro.

Siempre hay que resguardarse...

Simón como bien lo describiste en un principio es un frescolín, entonces tal vez... no habia que enrrollarse tanto... pero bueno somos ingenuas.. supongo que éso te sacó de casillas.


Un abrazo y fuerza!

Francisca dijo...

Me da pena pensar que cuando uno es más cautelosa se queda sola. A ratos creo que debería ser más crédula, es más, incluso hasta menos prejuiciosa, pero vaya, la razón al final está en ser desconfiada, porque justamente los excesos de confianza son los que más me han traído problemas... o quizás uno siempre debería esperar menos, para no salir tan decepcionada....

Bowman dijo...

La desconfianza en sí no es mala, lo es si lo eres con todos y por todo, pero estar un poco alerta a lo que sucede a tu alrededor, medir palabras y acciones de los demás, es una buena manera de evitar desengaños, aunque al final si te la tienen que dar, te la darán.
Los amigos de verdad se descubren en estas ocasiones, para ir de fiesta valemos todos.
Cuidate mucho.
Saludos

Vane dijo...

Muy sabio George Eliot, las personas son aquellas que nos reflejan sus instintos, su preocupación y una seguidilla de acontecimientos que nos hacen confiar o no en ellas, pero cuidado, cuidado con la obsesion o paranoia de algo con la desconfianza... es algo de piel, de intuición tal vez, no lo se... pero por ejemplo independiente de que con Simón haya pasado algo o no con Paty tu de antes tenias una desconfianza de él, recuerdo un post que hiciste en mi blog, diciendo que no estabas segura de que Simón pudiera entregarte ese abrazo calido que necesitabas... piensa en ello, y lo que creas sea lo mejor para ti, a veces nos caemos y equivocamos, somos seres con derecho a errar, pero no te hagas daño ni te atormentes una vez me dijeron elimina lo toxico de tu vida para poder suspirar!! intentalo!!
un gran abrazo!

★Honey Moon★ dijo...

Que buen posteo anais.. que buenas reflexiones , a menudo nos tapamos los ojos ante verdades manifiestas porque es mas facil asentir que cuestionar..tenes razon.. cuando me dicen que estoy bella y en el fondo se que no es asi, incluso tengo un no se que que me impide decirle:che deja de versearme.. porque me pongo a pensar que esa persona se puso en la molestia de halagarme cuando no habia necesidad.. se entendio?
jeje.. besos
me gust mucho este posteo..

Anaís Sandiego dijo...

Natilla_Adhara: gracias por tu comentario es exactamente a lo que me refería. No se puede andar desconfiando tampoco de todo el mundo por la vida, pero sí es parte de un aprendizaje saber en quiénes podemos confiar y en quiénes no. Gracias por visitarme y saludos.

Saruki: no me molesta que sea fresco, sino que no pueda confiar en él. Creo que hasta preferiría que no me dijera nada en vez de mentirme. Gracias por la fuerza, un beso.

Francisca: creo que has tocado un buen punto, que es cuando uno se ilusiona demasiado con una persona, sin tener bases para ello. Después el costalazo es bien fuerte. Parece que ambas tenemos que encontrar el “justo medio”... jeje. Saludos.

J. Carlos: es cierto lo que dices, hay que resguardarse, pero lo triste sería tener que hacerlo con los amigos más íntimos o con la pareja, que son justamente las personas de quienes, se supone, no tendríamos por qué desconfiar. Saludos :)

Blanky: tienes razón, Blanky, con Simón jamás ha existido la confianza total. Pasa que antes pensaba que era una cuestión de tiempo, y ahora es desconfianza, en realidad. Un gran abrazo y gracias por tu comentario :)

Beetlejuice Girl: lo entendí a medias. No creo que uno deba pensar que el otro “se tomó la molestia de halagarnos” porque para decirnos algo que evidentemente es falso, mejor se hubieran quedado callados. Ahora, creo que, como tú bien dices, también nosotros validamos esas mentiras porque nos resulta más fácil callar que cuestionar.
Qué bueno que te gustó, saludos.

Elías ... dijo...

Cuando la desconfianza es excesiva, se convierte en persecución (sentirse perseguido), y esta sensacion te lleva a la obsesion... gralmente vivimos con desconfianza, pero como tu dices, es como un virus....siempre está ahi, y se aparece cuando bajan las defensas...asi q no le pierdas el control a tu desconfianza....piensa: todos mentimos, pero no te esperas que a quien quieres (o proyectas querer) te mienta....animo, que hay cosas peores...

Anónimo dijo...

Me gustó tu blog, y me pareció super interesante lo de la desconfianza. ¿Sabes?, cuando una es engañada, cuesta mucho volver a empezar confiar, pero lo importante es hacerlo.
También estamos las que nunca más volvemos a empezar, sino que más bien tomamos la soledad como opción, como decisión propia.
En mi caso, no me molesta para nada, pero también sé que un día quizás, añore tener a alguien a quien abrazar a medianoche, o que me sonría y me mire como si fuera la única mujer del planeta =)
Saludos.

Michelle dijo...

la desconfiaza es nuestra defenza... no es que no podemos eliminarla ... es que no debemos.
Tampoco digo que desconfiemos de todo, si no que no debemos dejarnos llevar en exseso por ese instinto que nos dice "oye... las cosas no son asi, piensalo", debemos escucharlo, analizarlo un poquito y ver si es verdad o no...

bonita reflexión
besos!

Blog de alma dijo...

La base de la confianza radica en nuestras propias seguridades...desde ahí las mentiras del mundo no te alcanzan

Mo dijo...

La desconfianza es algo que está ahí y que difícil de atajar, de hacer que desaparezca es....
Simón te la ha causado y eso te ha hecho frágil, susceptible, desconfiada...
Es como la frase que dicen.."Cuando el río suena..agua lleva.."

pero hay que aprender a controlarla tienes razón, porque a veces nos puede hacer ver también fantasmas dónde no los hay...

Así que Anaís, desconfianzas sin motivo las justas..Y si las hay a seguir nuestra intuición...

Un beso linda.

Blogger Pechocho dijo...

Saludos, Anaís.
Desconfiar es necesario. Acto ineludible en todo tiempo habido y por haber. Hacerlo siempre y hasta de tu propia sombra. Pero cuando ésta ya se manifiesta en constantes vocecitas que vienen del interior (personificadas en Pepe Grillo)... aguas!!!! (como se dice acá en Mèxico, jeje).

Saludos. Y buen fin.

Anónimo dijo...

Huy que te enrollaste...
relajate y no pesquis mas...
de verdad sirve.
Mas sabe el diablo por viejo;)

Selene Emireth dijo...

La desconfianza, depende de hacia quien sea, la desconfianza en la pareja es lo peor que te puede ocurrir, siempre vas a ver sombras donde no las hay, y eso no es vida, siempre es bueno desconfiar pero por ejemplo de gente que acabes de conocer o algo asi, de las que ya conoces hacia tiempo es una falta de respeto desconfiar de ellas.

Selene

Mary Rogers dijo...

Poco queda que agregar. El tema es conseguir balancearse, como el buen equilibrista, entre no ser ingenua que te pase la vida por encima y no ser tan desconfiada que te impida vivir de verdad.

Anónimo dijo...

Yo creo que hay que aprender a convivir con la duda, porque en definitiva nunca se está 100 % seguro, de nada.... entonces mejor hacer una vuelta de página y pensar hacia adelante. Si tiene que ser, será, si sirvió para que te elija a vos otra vez, serivió de algo. No es fácil, y cuesta mucho, pero mejor pensar asi. Hacerse rollo, bo sirve.
beso

Hakuna Matata dijo...

juste pensaba en eso esta mañana, voy a un cusro con relatibidad, cuando ingreso saludo a todas (ojo todas mujeres), si lespasa algo bueno las felicitro, si les pasa algo malo las admiro por el valor, lo hago de verdad, pero siento como muchas miran con cara de desconfianza, muchas no hablan, no se acercan ni a saludar, solo miran desde un rincon, me molesta cuando la gente no participa, ni de los dolores ajenos, ni de los triunfos ajenos, al final me siento mal por ser tan diferente, talvez soy muy metiche, no lo se, tanto desconfiar te nubla la vista... y te deja ciego.

Anaís Sandiego dijo...

Elías: gracias por el ánimo. Estoy en busca de ese equilibrio.

Pauly: qué bueno que te gustó el blog, para mi es un gusto escribir en mi diario y, sobre todo, es un gusto que me lean y que comenten, Realmente han salido cosas muy buenas: las vibras positivas, el apoyo, el ánimo.
No veo nada de malo en la soledad si es tu opción, pero yo creo que uno siempre espera encontrar a alguien que la entienda y con quien no haya secretos. Un beso, Pauly.

Michelle: exactamente a eso iba y eso es lo que estoy tratando de hacer. ¡Gracias Michelle!

Alma: muy interesante lo que comentas. Creo que las seguridades7inseguridades y las confianzas/desconfianzas se construyen y destruyen a cada rato. A partir de esos terremotos nos vamos armando.

Moni: sí, y la idea es cargar sólo con los fantasmas que de verdad importa y no con un ejército de ellos. Un beso muy grande para ti Moni, y mucha fuerza :)

Blogger Pechocho: todavía no escuchó varias voces, el día que haya más de un Pepe Grillo en mi cabeza me voy a preocupar... jajajajaja. Saludos hasta México y buen fin de semana para ti también.

Laura Virtual: estoy tratando de hacer eso, la verdad estoy un poquito cansada y necesito desconectarme un poco del cuento. Gracias por pasar.

Selene: gracias a tu post me he puesto a mirar las cosas desde la otra vereda. Yo me sentiría mal si desconfiaran de mí, es cierto. Gracias por abrir este nuevo pensamiento Selene.

Mary Rogers: exactly ;)

Nada se pierde: igual no debe ser fácil convivir con la duda y sobre todo no sé si quiero, o por lo menos no las 24 horas del día. Creo que debe haber tiempo para la duda y tiempo para la confianza (y personas para uno y otro también).

Claudia: es como lo que me decía Selene. Tienen razón, hay que hacer el ejercicio de ponerse en el lugar del otro, creo que además serviría mucho para equilibrarme. Gracias por pasar.

Unknown dijo...

Yo siento que cuando desconfías es porque no confías en ti misma.

O sea, si hubieras sido tu en la situación aquella sabes que no estarías ahí por trabajo sino por placer con un medio mino coqueteando, por lo que obviamente no le crees a Simón. O, simplemente, no es tanto el cariño o el amor para confiar ciegamente en él, o no te quieres tanto a ti misma para sentirte segura de él y de la relación que llevan.

Me juí en la volá ... sorry
(Mucha teleserie.. jajaja)
saludos

Sandra

Anaís Sandiego dijo...

Sandra: créeme que pensé en las mismas cosas que tú después de verlo. ¿No me estaré pasando rollos? ¿Y si de verdad es una entrevista de trabajo? Lo que me mató la confianza fue que después del 'incidente' no respondía el celular y no me llamó en todo el fin de semana largo.

Ahora, también es cierto que mi relación con él no es una de esas relaciones en las que existe una verdadera confianza...

Ya me alargué demasiado.

Un abrazo y gracias por pasar. ;)

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